El legislador atiende a las necesidades que vienen reclamando los colectivos más desvalidos.

En efecto, el 1 de marzo de 2022 se publicó la Ley 4/2022 de 25 de febrero de Protección de los consumidores y  usuarios frente a situaciones de vulnerabilidad social y económica.

¿Cuál es el objetivo de esta ley?

La adopción de medidas urgentes para hacer frente a determinadas situaciones de vulnerabilidad.

Esta norma, en vigor desde el 2 de marzo, pretende dar amparo a aquellos colectivos que, dentro del ámbito de las relaciones de consumo, se enfrentan con especiales obstáculos para desenvolverse en condiciones de igualdad, reconociéndose determinadas variables que pueden afectar, tales como:

  • Edad
  • Sexo
  • Origen nacional o étnico
  • Lugar de procedencia
  • Discapacidad
  • Desconocimiento del idioma
  • Nivel de formación
  • Lugar de residencia
  • Situación social, económica y financiera
  • Problemas asociados al uso de nuevas tecnologías.

¿Qué novedades introduce?

Así, se considera consumidor vulnerable aquel que se encuentra en una especial situación de subordinación, indefensión o desprotección que le impide el ejercicio de sus derechos como persona consumidora en condiciones de igualdad.

    • Se modifican artículos referidos al etiquetado y presentación de bienes, incidiendo en que deberán ser de fácil comprensión.
  • Determina que, en el plazo de un año, el gobierno desarrollará un etiquetado en alfabeto braille, así como otros formatos que garanticen la accesibilidad a las personas con discapacidad visual.
  • Establece que el gobierno promoverá en el plazo de tres meses, las modificaciones legislativas necesarias para garantizar la atención personalizada en los servicios de pagos a los consumidores vulnerables para:
    • Evitar que el cierre de las oficinas bancarias implique el cierre de los cajeros automáticos externos.
    • Incrementar el personal de apoyo.
    • Instalar señales de prioridad en el uso de cajeros automáticos por las personas vulnerables.
    • Utilizar tecnologías de acceso a banca sencillas y seguras.
    • Proteger a los usuarios bancarios de robos, engaños y estafas online.
    • Facilitar la atención presencial a las personas de mayor edad y colectivos con dificultades para acceder a las nuevas tecnologías.
    • Acercar los servicios financieros a las personas en el medio rural.