El Tribunal Supremo anula un préstamo de tarjeta “revolving” por considerar usura un interés del 27%.

El fallo del Alto Tribunal recuerda a los bancos que el riesgo de impago no justifica intereses tan altos y les dice que no comprueban adecuadamente la capacidad de pago de los clientes. Su conclusión sienta jurisprudencia y afecta a millones de clientes potenciales.

EL CASO

  • En 2012 una clienta de Wizink (firma que compró los negocios de tarjetas Citibank y Barclays) contrató una tarjeta de crédito Visa Citi Oro, con un interés del 27% TAE.
  • En octubre de 2018 un juzgado lo consideró usura. Wizink recurrió y la Audiencia Provincial de Cantabria volvió a dar la razón a la clienta declarando el contrato nulo basándose en la Ley de Usura, que prohíbe prestar dinero con intereses “leoninos”.

LA SENTENCIA

  • El interés del que se parte es tan elevado que hay poco margen para incrementar el precio de la operación de crédito sin incurrir en usura.
  • Los bancos no pueden cobrar intereses tan altos amparándose en que muchos clientes luego no pueden pagarlos, sobre todo porque conceden créditos sin estudiar la solvencia de los clientes.
  • En cualquier caso, habrá que analizar caso por caso atendiendo a las circunstancias de cada cliente.

LA TRAMPA DE LAS REVOLVING

  • El principal reclamo de estas tarjetas son los “cómodos plazos” en los que se puede devolver el crédito: mensualidades muy bajas que son las que pueden permitirse consumidores con pocos ingresos.
  • Las cuotas bajas ni siquiera cubren los intereses, que se suman y financian con el resto de operaciones.
  • Se crea una especie de “efecto bola de nieve”: los usuarios van pagando cuotas, pero la deuda nunca termina de pagarse.